Señor a ti te canto, esta humilde alabanza,
Señor a ti te elevo, esta humilde canción,
Pues tú viniste al mundo, a transformar mi vida,
Y para redimirnos, de la condenación.
Yo sé que tú te agradas, cuando los redimidos,
Pregonan tus milagros, tu poder y virtud,
Te pido que te agrades, de los que en alabanza,
Elevan sus canciones de amor y gratitud.
CORO
En aquel día glorioso cuando se cante en gloria,
Los coros celestiales en el celeste Edén,
//David tocará el arpa y el ángel la trompeta,
Y yo con mi guitarra te alabaré también//.
II
Señor tú te mereces que nuestras melodías,
En el cielo y la tierra resuenen sin cesar,
Que te alaben los ángeles con coros celestiales,
Y así también los hombres te ofrenden su cantar.
El Señor puede darnos canciones en la noche,
Está escrito en la biblia, en el libro de Job,
Y al apóstol san Pablo con Silas en la cárcel,
Cantando a medianoche mi Señor los libertó.
CORO
En aquel día glorioso cuando se cante en gloria,
Los coros celestiales en el celeste Edén,
//David tocará el arpa y el ángel la trompeta,
Y yo con mi guitarra te alabaré también//.
CORO
En aquel día glorioso cuando se cante en gloria,
Los coros celestiales en el celeste Edén,
//David tocará el arpa y el ángel la trompeta,
Y yo con mi guitarra te alabaré también//.