En la cruz se lavó todo lo que mi alma tanto cargó,
Fuiste tú, mi Jesús quien pagó el precio de mi perdón,
Y no hay palabra que quiera hablar,
Ni hay canción que se me antoje cantar,
Pues si no es para ti, no hay razón para poder existir.
CORO
Eres el aire, la lluvia La risa de los niños,
La fuerza, la calma, La guía en el camino,
Misterios estrellas, galaxias y sorpresas que llenan,
Eres la noche el día, La luz que me ilumina,
Destino pasado, tesoro más preciado,
La llave la puerta, la voz que me alimenta y alienta,
Tu amor hace eco en todo mi universo.
II
Eres tú la razón por la cual,
Perdido ya no estoy,
Mi dolor se marchó por la fuerza,
De tu abrazo y calor,
Y no hay palabra que quiera hablar,
Ni hay canción que se me antoje cantar,
Pues si no es para ti,
No hay razón para poder existir.
CORO
Eres el aire, la lluvia La risa de los niños,
La fuerza, la calma, La guía en el camino,
Misterios estrellas, galaxias y sorpresas que llenan,
Eres la noche el día, la luz que me ilumina,
Destino pasado, tesoro más preciado,
La llave la puerta, la voz que me alimenta y alienta,
Tu amor hace eco en todo mi universo.
REPETIR
Y no hay palabra que quiera hablar,
Ni hay canción que se me antoje cantar,
Pues si no es para ti,
No hay razón para poder existir.
CORO
Eres el aire, la lluvia La risa de los niños,
La fuerza, la calma, La guía en el camino,
Misterios estrellas, galaxias y sorpresas que llenan,
Eres la noche el día, la luz que me ilumina,
Destino pasado, tesoro más preciado,
La llave la puerta, la voz que me alimenta y alienta,
//Tu amor hace eco en todo mi universo//.