El día que tú me llamaste, hay cómo me acuerdo,
Mirándome en el lodo sin dudarlo me diste la mano,
Asombroso fue esto para mí,
Pues tu presencia yo la desconocía por completo,
Quería comprender muy bien lo que estaba pasando,
Mientras muchos gritaban gloria a Dios poderoso momento,
Cuando digo siempre te voy a amar,
Todo mi cuerpo se estremece por completo,
Y siento tu presencia sobre natural,
Y mi oración puede cruzar el mismo firmamento,
Puedo adorarte Cristo y ya no tengo miedo.
CORO
//Usted llegó y cambio todo en mi vida,
Dándome lo que yo no merecía,
Usted me enseño amar también a perdonar,
No importa sufrir si hoy vives en mí,
Hoy somos tú y yo gloriosa sinfonía//.
II
Y siento tu presencia sobre natural,
Y mi oración puede cruzar el mismo firmamento,
Puedo adorarte Cristo y ya no tengo miedo.
CORO
//Usted llegó y cambio todo en mi vida,
Dándome lo que yo no merecía,
Usted me enseño amar también a perdonar,
No importa sufrir si hoy vives en mí,
Hoy somos tú y yo gloriosa sinfonía//.
Excelente!!